C/ Bisbe Panyelles, 19, 2º 1ª08720 Vilafranca del PenedésBarcelonaAnatomía ocular.Cataratas.Córnea y superficie ocular.Glaucoma.Retina y vítreo.Párpados y vía lagrimal.Neurooftalmología:•Neuritis óptica retrobulbar.•Neuropatía óptica isquémica anterior.•Parálisis músculos extraoculares.Pediatría.Defectos de refracción.NeurooftalmologíaNeuritis óptica retrobulbar.La neuritis óptica es una inflamación del nervio óptico que puede dar lugar a una importante pérdida de visión en algunos casos. Es más frecuente en jóvenes y mujeres. Se presenta con son visión borrosa que se instaura en varios días o semanas, alteración de los colores, sobre todo del rojo, y dolor retroocular que empeora con los movimientos oculares. La neuritis óptica retrobulbar puede darse aislada o asociada a infecciones víricas, enfermedades autoinmunes como el lupus eritematoso sistémico, o enfermedades desmielinizantes como la esclerosis múltiple. En la exploración del fondo de ojo podemos encontrar una inflamación de la cabeza nervio óptico, pero la gran mayoría de veces no observaremos nada porque la inflamación se produce por detrás del globo ocular. Pero en el campo visual puede aparecer un defecto central, y al examinar la visión cromática con el test de Ishihara, se puede apreciar un defecto en la visión de los colores. Se recomienda realizar una resonancia magnética nuclear en todos los casos de neuritis óptica para descartar esclerosis múltiple y beneficiarse de un tratamiento precoz. La agudeza visual suele recuperarse espontáneamente en 1-3 meses, en un grado variable. Aunque los corticoides no tienen un efecto beneficioso sobre la visión, sí se ha demostrado que un tratamiento con dosis altas de corticoides puede acelerar la recuperación. Además, es importante tratar siempre la causa de la neuritis. Neuropatía óptica isquémica anterior.La neuropatía óptica isquémica anterior (NOIA) es la causa más común de lesión aguda en la cabeza del nervio óptico en mayores de 50 años. Se produce una falta de irrigación en el nervio óptico. Suele presentarse como una pérdida de agudeza visual de manera brusca e indolora. En el fondo de ojo se observa una inflamación de la cabeza del nervio óptico, con pequeñas hemorragias alrededor. En el campo visual aparece un defecto altitudinal, de manera que toda la mitad superior o inferior aparece de color negro, que concuerda con la pérdida de visión en toda esa zona. La NOIA se clasifica en: •Arterítica: Es más frecuente en hombres, de una edad media de 70 años. Se debe a la oclusión, por causas inflamatorias, de unas pequeñas arterias que llegan a la cabeza del nervio óptico. Se puede asociar a la arteritis de células gigantes, una enfermedad muy grave y potencialmente mortal, por lo que es importante realizar un control estricto para descartarla. Los síntomas típicos que podemos encontrar en esta enfermedad son cefaleas, hipersensibilidad en el cuero cabelludo, dificultad al masticar, pérdida de peso, malestar general. Además, estos pacientes muchas veces refieren varios episodios de pérdida de visión brusca, de segundos o minutos de duración, que luego se recupera espontáneamente. Todo esto nos debe hacer sospechar de una posible NOIA arterítica que requerirá de un diagnóstico inmediato mediante una analítica de sangre y una biopsia de la arteria temporal, una arteria que pasa por la sien, y que nos confirmará el diagnóstico•No arterítica: Es la forma más común, y se da en paciente más jóvenes, alrededor de los 50 años. Se produce por una falta de irrigación de los vasos que van al nervio óptico. Se relaciona con enfermedades como la diabetes mellitus, la hipertensión arterial, la hipercolesterolemia y algunas enfermedades cardíacas y pulmonares, por lo que es fundamental un estricto control de los factores cardiovasculares para prevenirla. Inicio > Patologías oculares > 12>Dres. Khaouly - C/ Bisbe Panyelles, 19, 2º 1ª - 08720 Vilafranca del Penedés (Barcelona) Telf. 93 817 45 13Cita on-line